La fundación de Roma

La fundación de Roma

Rómulo y Remo

Día del Patrimonio 2012

 

         En la ciudad de ALBA LONGA, fundada en el siglo XXI a. de Cristo, reinaba NUMITOR. Su hermano AMULIO, un buen día, decidió arrebatarle el trono y, para que sus sobrinos no pudieran reclamarlo, resolvió matarlos a todos menos a la única hija, REA SILVIA. A ella la encerró en el templo de la diosa Vespa para que se Consagrara sacerdotisa.

 

         Las sacerdotisas debían ser castas y puras y la que no cumplía con ese precepto corría el riesgo de ser enterrada viva. Cierto día en que REA SILVIA se hallaba descansando junto a una fuente del bosque sagrado, pasó el dios MARTE que, al verla tan hermosa, se enamoró de ella y la dejó encinta. Meses después nacieron dos gemelos.

         Cuando Amulio se enteró, mandó arrojar a Rea Silvia al río Tíber y a los gemelos los colocaron en una canasta y dejaron que la corriente los llevara lejos.

         Como el río estaba poco crecido, la canasta de los dos pequeños se quedó atascada en la orilla. En ese lugar vivía una LOBA, llamada LUPERCA que, al verlos llorando de hambre, los amamantó. Los niños crecieron junto a la loba sanos y fuertes, pero su padre, el dios Marte, comprendió que los gemelos necesitaban el calor humano y los confió al cuidado de un pastor y su esposa. Ellos quedaron encantados porque no tenían hijos y les dieron los nombres de RÓMULO y REMO.

         Los niños eran sanos, bellos y vigorosos, pero muy inquietos.

         Buscando darle nuevas emociones a su vida y divertirse, comenzaron a robarle a unos ladrones. Éstos estaban tan enfadados que los atacaron por sorpresa, tomaron prisionero a Remo y lo llevaron ante Numitor acusándolo de robar sus tierras. Numitor recordó las desgracias sufridas y pensó que podría ser uno de los gemelos de su hija Rea Silvia. Cuando llegó Rómulo a prestar ayuda a su hermano, le relató la historia a Numitor y así reconoció que eran sus nietos y los acogió con gran alegría.

         Enterados de las malas acciones de su tío Amulio, decidieron atacarle y recuperar el trono para su abuelo. Armaron un pequeño ejército, atacaron por sorpresa el palacio y mataron al traidor.

         Rómulo y Remo se quedaron algún tiempo con su abuelo en Alba Longa y luego decidieron fundar una nueva ciudad en el lugar, donde fueron encontrados por la loba, a la cual llamaron ROMA.

         Eligieron una de las siete colinas que dominaban el sitio y con un arado trazó un surco circular a cuya vera, más tarde, se construiría la primera muralla, pero luego esa ciudad se hizo más grande y ocupé otras seis colinas cercanas. Por eso se llamó a Roma la ciudad de las siete colinas.